1948 El Arte del Cantinero (Mixellany)

les, quiso que se hiciesen trípodes y vasos como premios a los triunfadores. Muchos vasos eran destinados a los tem- plos y sacrificios» así como para el adorno de las tumbas. El barro y los metales, como el oro y la plata» entraba en la fabricación de vasos. Por primera vez fueron conocidos los vasos pintados, en el siglo XVII. Cuando fueron conocidos estos vasos, creyeron que fuera obra de los etruscos —hoy toscanos —. Más de mil vasos de todas las dimensiones y formas pin- tadas, están descriptos en un catálogo del príncipe italiano Canino, que reproduciendo la opinión de Passeri, sostenía que eran originarios de la Btruria. Pero autores como Raoul- Roehette, han demostrado la falsedad de las aseveraciones de Canino y sostienen que esos vasos son originarios de Grecia. En la Alta Grecia y en Sicilia, se encuentran muchos monumentos de esa clase que reproducen motivos de la Mi- tología e Historia de aquellas regiones, descriptos en caracte- res griegos. Por esos vasos, entre otras obras de arte» se han podido conocer los progresos artísticos de Grecia. Y se llegó a la conclusión» de que si la pintura de esos vasos no era obra de artistas destacados, eran reproducciones por manos dies- tras, de copias de cuadros célebres. Por las pinturas que con- tenían esos vasos, se han podido conocer fábulas ignoradas» escenas misteriosas, de las que no hace mención ningún au- tor. Las pinturas de esos vasos han servido, también, para esclarecer textos oscuros de varios escritores y conocer diver- sos sucesos poco claros. Estos hechos, así como los vasos que se ven en las medallas, dan motivos más que suficientes para considerar esos vasos, como originarios de Grecia. En Ñapóles, en Capua, en Ñola, en la Campania, en Pes- to, en Lucania y en Sicilia, encuéntrense a menudo, en las tumbas, vasos de esa clase. Y el número y belleza de los mis- mos» varía según la fortuna de aquél a quien pertenece la sepultura. Se ha creído que los vasos con inscripciones de que ha- bla Ateneo, eran pintados, pero es más seguro que fuesen de metales preciosos sobre los cuales podía escribirse lo que se quisiese. Créese que Ateneo se refería a vasos como el que estaba consagrado a Diana en el templo de Capua y en el que había escrito varios versos de Hornero, en oro incrustado en plata. Entre los nombres de los artistas o fabricantes de vasos de la Grecia clásica» destácanse Níeostenes, Esquilo, Andóci- des, Eufronias, Eutimiades, Chacilion, Hieron» Epictetos, Phin-

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