1948 El Arte del Cantinero (Mixellany)

de las mezclas que hacíamos de las clases inferiores de whis- kies, cuando sometíamos a la experiencia a los hombres que teníamos a nuestra disposición, que cuando se les daba los whiskies de mejores calidades» que arrojaban mayor cantidad de congéneres del alcohol. Y en cuanto al descanso, hemos encontrado menos insom- nios en las noches que empleábamos en nuestros estudios, esas mismas clases inferiores de whiskies, que las noches que empleábamos las clases superiores de esos mismos licores. Las cintas que registraban los aparatos que controlaban los estados de los diez hombres, a través del sueño, mostraban un efecto interesante de esos congéneres. Las noches que bebían los whiskies de alta calidad, denotaban las cintas un estado de excitación e inquietud, en la primera media hora de sueño» de extraordinaria magnitud. Esta excitación e inquietud, son exactamente los mismos efectos que causan los narcóticos más crudos. Pasado este tiempo, los hombres se encontraban completamente anonadados, en completo estado de laxitud, como si estuvieran muertos. Los records que se llevaban de la habitación de los tro- feos, nos dicen algo más respecto al estado de los hombres en las noches que bebían Jos whiskies más caros. Esos días la cantidad de orina que se recogía era muy pequeña» preci- samente, porque estando los hombres profundamente dormi- dos» no sentían los toques de esa llamada fisiológica. Y al le- vantarse ocurría otra cosa singular; las micciones eran cor- tas, prueba inequívoca de los mismos trastornos que hemos visto en el sueño. De todas las maneras, el sueño era más reparador, más tranquilo y más sereno, las noches que inge- rían los whiskies más ordinarios. Con esos efectos corporales, nos fue fácil encontrar las diferencias entre la eficiencia física ordinaria y normal de la vida del hombre, con la de los que toman más o menos can- tidades de licores. Las pruebas de antes del desayuno, de- mostraban que los hombres podían controlar sus músculos con más exactitud las mañanas siguientes de haber tomado los licores de clase inferior, que las de las que habían consu- mido los licores de mejor calidad. Esto descubre el secreto, por qué un empleado del Banco, al manejar la máquina de su- mar, sufre equivocaciones, y por qué el dependiente o el ven- dedor, al afeitarse cuando se levanta» se da cortes en la ca- ra una y más veces. En cuanto a los efectos mentales» las influencias de los congéneres alcohólicos, son más señalados. Los días siguien- tes de haber bebido el Whisky que se considera más inferior, concentraban mejor la mente y hacían mejores cálculos y más rápidos, los hombres que estaban sujetos a nuestras prue- bas» que los días siguientes que habían tomado los whiskies

Digitised by Jared M Brown & Anistatia Miller, 2009

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