1878 Manual del Cafetero by Figuier y Quentin (2nd edition)

— 51 — tierras que la circuyen,sin lo cual estas ceden siempre . algún caldrico al Meló y se establece una fusión per judicial. Es malsano, y áun peligroso, entrar en una nevera por la baja temperatura y el viciado ambiente de estos sombríos recintos. Tales son los principios de física en que deben fijarse los constructores de neveras. Es un error creer que estos almacenes deban estar á cierta profundidad del suelo; las excavaciones subterráneas no presentan nin guna ventaja. No hay duda quelas capas profundas del suelo en que estaría entonces establecida la nevera,no participarían de las variaciones de temperatura del aire exterior y que seria fresca en verano; pero esta tempe ratura e^tá siempre muy por sobre cero; es Ja tempera tura media delrecinto, esto es, de -J- 5 á -|- 6°. Lafres cura de una bodega es tan sólo un término relativo. Una bodega nos parece firesca en verano y caliente en invierno, pero en realidad, su temperatura es invaria ble y siempre demasiado caliente para una nevera, y áun cuando se establezca en un subterráneo,no se está dispensado de emplear materias aisladoras. Es además muy difícil extraer las aguas de lafusión del hielo que se depositan en el fondo, y es de todo punto imposible si la excavación es algún tanto profunda, sin el auxi lio de una bomba.Otro de losinconvenientes de las ne veras subterráneas es que la madera y la paja, que son los materiales aisladores más en uso para preservarlas.

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