1948 El Arte del Cantinero (Mixellany)

contenido de la segunda. No se permite bajar la temperatu- ra de 26°. "Con dos cubas preparatorias es suficiente. Una, contie- ne el jugo; otra, alimenta las cubas de fermentación. "Cuando la número 1 está llena, se divide su contenido con la número 2. No se deja correr el zumo preparado en la número 2, sino cuando está llena hasta la tercera parte con la número 1. Existen dos cubas de fermentación. Cuando las dos cubas están casi llenas se interrumpe la comunicación de la 1 con la 2 y se comunica la 2 con la 3; lo mismo se hace luego interrumpiendo la 2 con la 3 y comunicando con la cuarta, etc., etc. Se abandona luego a la fermentación 20 ó 24 horas. Una vez terminada la fermentación, puede ini- ciarse la destilación". Igual procedimiento que el dado a conocer para fermen- tar la melaza» úsase para fermentar el zumo de la caña, que se llama guarapo. El ron obtenido de éste, es más fino y de- licado que el de la melaza. La graduación alcohólica del ron, es de 43 a 47% centí- grados. Por ser de gran utilidad para todo Cantinero, el presente estudio, lo trasladamos íntegro, a esta obra, traducido del in- glés» por Robert McClintock e Hilario Alonso, en colaboración, del que es autor Donald A. Laird» químico del Laboratorio Ri- vercrest» de Hamilton, N. Y. Desde los tiempos remotísimos en que por olvido, una mujer o un hombre, dejó algún grano en un lecipiente hu- medecido, y naturalmente» por los efectos de la propia natu- raleza de que se encontraba rodeado, se produjo la fermenta- ción del mismo y se conoció a consecuencia de ello» el alcohol en sus formas mútiples, y el hombre se dio a beberlo y a sentir sus efectos y las sensaciones que se experimentan al día siguiente de haber consumido alguna cantidad de esa cla- se de espíritus» hasta nuestros días, nadie se dio a pensar en hacer alguna cosa o tomar alguna medida, para evitar los trastornob que ocasiona al organismo humano el whisky des- pués de una orgía. Yo no quiero que el hombre corriente se haya detenido a pensar en esas cosas» y menos, que por los males que sien- te al día siguiente, enmiende su conducta y trate de refor- marse, no bebiendo más esa clase de licores; pero sempre su- puse que los hombres de ciencia, al menos» deberían dedicar _ 141 — Digitised by Jared M Brown & Anistatia Miller, 2009 EN QUÉ FORMA EL WHISKY CONVIENE MÁS AL HOMBRE