1948 El Arte del Cantinero (Mixellany)

maravillosa, de aguardientes envejecidos puestos en infusión, mezclados, con Merbas aromáticas y medicinales? ¿Y» no ofreció, aquel padre Cartujo, por el 1778, allá en Francia, al inglés William Beeeford» una mezcla de Benedictine y agua, para aliviarle de sus fatigas? Los cosecheros de vino de Jerez, tiene la costumbre an- tiquísima» desde hace varias siglos, de tomarse por la maña- na antes de almorzar y muchas veces antes de desayunarse» lo que llaman un torito, que es una mezcla por partes igua- les» de vino dulce y vino oloroso. ¿Qué es eso, sino un coctel? Don Mariano López Muñoz, poeta andaluz» que brilló al final del siglo pasado» nos da a conocer en su obra las "Tro- vas del Guadalete* 1 » otro cotel que consumía un inglés que an- daba por las tierras de "María Santísima", que el pueblo an- daluz con su gracia denominó chiribita y que consistía en una copa de Jerez seco mezclado con Angostura bitters, que el referido inglés llamaba: sherry-bítter. El Masagran» una mezcla de agua, café solo y azúcar» creación española es» también, muy antiquísima, que aunque un refresco» ¿qué es sino un coctel o una bebida correspon- diente a la familia de los cocteles? Y» qué diremos de la Sangría» otra mezcla de vino y ga- seosa» o limonada con vino y azúcar, que se consume en Es- paña desde hace siglos? ¿No pertenece» también» al género de los cocteles? En España» mucho antes de la guerra europea y de la guerra hispanoamericana, ya se consumían en las fiestas fa- miliares» una clase de ponches hechos a base de vinos diver- sos con fruta natural, tal como melocotones, sandía» melón de Castilla» peras» manzanas, cerezas, hielo y azúcar» mezclados y revueltos. Y hasta sin hielo» cuando no era conocido. Es típico en España y »en todas sus regiones» poner en maceración con toda clase de aguardientes» cerezas» guindas» ciruelas y otras clases de frutas, para tomarlo en ayunas» al levantarse» chicos y grandes» mujeres y hombres. A fines del siglo pasado» antes» mucho antes de que el Príncipe de Gales —hoy duque de Windsor— se diera en tomar mezclados cerveza y coñac, por la playa de Biarritz, ponien- do de moda esa mezcla entre las personas elegantes de am- bos sexos del viejo mundo» ya Mariano de Cavia» el cronista sin par que enalteció con su elegante y limpia prosa, las le- tras hispanas» lo tomaba. Decía Mariano de Cavia cuando los amigos le inquirían por qué tomaba esa mezcla: "Cerveza» para apaciguar el fue- go del coñac» y coñac, para entonar la excesiva blandura de la cerveza* 1 . — 26'2 -—

Digitised by Jared M Brown & Anistatia Miller, 2009