1948 El Arte del Cantinero (Mixellany)

intenso consumo alcohólico, que el anfitrión, con conocimien- to de que el apetito había de seguir a tales ingestiones, se enorgullecía de aparejar con los tragos» una provisión abun- dante de hors d'oeuvres o bocaditos apetitosos» resultando a menudo que los que asistían a esos cock-tails partys, comían tanto de los mismos, que no obstante las oblaciones sustan- ciosas que enjurguitaban, a la hora de sentarse a la mesa» no les quedaba apetito para poder comer. "Las 300 o más clases de cocteles —sigue diciendo Ste- vens— q Ue llevan sus nombres por todo el mundo y las más de 400 mezclas o mixturas con sus fórmulas, vivirán en la Historia de la América del Norte por muchísimos años. Su nomenclatura le pertenece» no solamente como crónica na- cional, sino de ciertas realizaciones sociales, industriales y ar- tísticas de una época. "Echando a un lado —refiere Stevens— los nombres mi- tológicos» ornitológicos» teológicos y zoológicos de los coteles, tales como Adonis, Bird ? Bishop, Poker» Creóle» Goat's Delight, Gloom Lífter y Top Toad» para nombrar algunos ejemplares de ellos» revelan quizás poci imaginación y originalidad» pe- ro tal vez nos den a conocer la causa de su origen". a la región más conocida por el nombre de la Florida» persi- guiendo descubrir el licor más maravilloso del mundo; La Fuente de la Eterna Juventud» dirigidos por el casi fabuloso conquistador» Ponce de León. Los caballeros ingleses acau- dillados por Sir Walter Raleigh, se posesionaron de la región que conocemos por la Virginia. Oglethorpe libertó a todos los deudores que llenaban las cárceles inglesas y colonizó el territorio que conocemos por Georgia» con ellos. Los Peregri- nos o Puritanos» mandador por Cotton Mather, se posesiona- ron de lo que conocemos pe** Mueva Inglaterra o sea» los Es- tados de Mame» New Hampshire» Vermout, Massachussetts» Connecticut y Rhode Isiand. Los suecos, colonizaron a Dela- ware. Los holandeses, New York. Guillermo Penn» con los Quakeis o cuáqueros, posteriormente, se encargó de unir y ter- minar toda esa colosal obra de colonización de la gran Re- pública Norteamericana, desde la Pennsylvania, donde se había afincado a su llegada a las tierras de América» tierras que ha- bía adquirido en propiedad, en pago de una deuda que tenía la Corona de Inglaterra con su padre, famoso almirante in- glés. Como es natural, los colonizadores» primero, construye- ron sus hogares» después, los hospedajes con todos sus servi- cios adyacentes. HISTORIA DEL TOM COLLINS Los españoles llegaron al Sur de Norte América» o

Digitised by Jared M Brown & Anistatia Miller, 2009

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