1949 El Bar Evolucion y Arte del Cocktail by J Sanfeliu Brucart

250 J' SANFELIU den parecer graciosas para contadas por un hombre sin escrúpulos, que hace, al final de ima fiesta, el recuento de las bajas que logró; pero el que tal realiza está tan lejos de ser im barman como de ser doctor respetable el que provocara enfermedades para presumir más tarde delos beneficios quealcanzaen el ejercicio desu sacerdocio. Si el barman no conoce su profesión o no tiene la moral obligada de ella, no pasará de ser un miserable con apariencias de señor, tras la trinchera repugnante de un mostrador, con armas camufladas frente a una masa inerme. ¿Ha tenido siempre trascendencia el cuidado de las bebidas? ¿Es moderna la afición a las mezclas? La bebida es la parte intelectual de una mesa; mien tras la comida no representa más que la parte material. Alejandro, aureolado por la victoria, para conseguir el título de gastrónomo hubo de acudir a Babilonia para doctorarse en el bien beber y bien comer. Y no aprove chó demasiado de sus estudios, por cuanto, como un vulgar ignorante y analfabeto,cuenta la Historia, para su deshonor, que en noche de orgía consiguió treinta y seis muertos al establecer premios, entre sus invitados, para el que más bebiera. El ruido de esta brutalidad ha reco rrido el tiempo de dos mil años. Las mezclas en el beber son casi tan antiguas como el agua, y la persona culta y escogida pone igual interés en degustar las aguas que los vinos. Las bromas equívocas y trucos refinados en derredor de la bebida siguen a la humanidad desde su origen. Plinto cuenta de un esclavo ladronzuelo que dedicá base a robar el vino de un odre a su amo: para que la